Un año más acudimos a despedirnos de las grullas hasta la próxima temporada, hemos visitado la laguna de Gallocanta, un humedal RAMSAR y una Reserva Natural Dirigida. Por la mañana comenzamos en el mirador de aves de Tornos, disfrutando de las primeras grullas de la jornada, de gorriones molineros, cernícalo y aguilucho pálido entre lo más cercano.
Después fuimos rodeando la laguna dirección al observatorio de la Reguera, por el recorrido recomendado en el centro de interpretación para no alterar ni la flora ni la fauna de la reserva. Nos paramos a disfrutar de los flamencos y las primeras acuáticas, aunque un precioso macho de tarabilla a dos metros nos desvío la atención, junto a un grupo de pardillos que empezaban a tener coloraciones nupciales. Para ajustarnos al horario nos fuimos directamente a la laguna de la Zaida, este año inundada, dónde además de un buen número de grullas y un grupito de flamencos, se observan garzas y garcillas, y un gran número de anátidas.
El día salió cálido, sin aire y luminoso, todo un regalo. Nos fuimos al hostal de las grullas en Tornos a comer pronto para poder aprovechar bien la tarde. Allí, como siempre recibimos un trato familiar y una buena comida casera.
Antes de la visita guiada nos acercamos a la orilla oeste para poder ver mejor las anátidas y terminamos disfrutando del centro de interpretación de la Laguna de Tornos, Carmina la guía del centro que nos enseñó la laguna nos llevó al observatorio de la Reguera, disfrutamos de toda la Laguna, las especies ya vistas por la mañana y algunos pequeños refugiados en los carrizos de la orilla como trigueros cantando. Terminamos con una entrada de grullas al atardecer espectacular cerca del mirador donde comenzamos la jornada. Mientras aprendíamos muchas cosas interesantes sobre el comportamiento de las grullas que Carmina con su pasión habitual nos iba relatando.
Fotos de Belén Cano, LM Bueno y Justo Alijarde con video incluido.
