En 1990 se creó el Jardín Botánico de Alcalá de Henares, es el más grande de la España peninsular y forma parte de la Red Internacional de Jardines Botánicos. Persigue objetivos conservacionistas, culturales, de investigación y recreativos. Tiene una extensión de 22 hectáreas y fue creado gracias al impulso de la Universidad de Alcalá, en cuyo campus se encuentra ubicado.
El grupo de botánica de ANSAR lo visitó el 9 de mayo de 2015, una jornada calurosa en la que recorrimos las distintos recintos temáticos, todos interesantes.
Digno de destacar es El Arboreto Ibérico, de algo más de una hectárea, que ofrece una visión completa de los árboles y arbustos de la Península, entre los que destacan pinsapos, sauces, olmos y sobre todo árboles del género Quercus, que están todos representados.
Este jardín, reúne también colecciones especiales de las que merecen especial mención la Rosaleda “Ángel Esteban”, un recinto de una hectárea, que partiendo de la donación que Ángel Esteban González hizo de su colección, incluye hoy una mayoría de híbridos de rosales de té junto a rosales antiguos y otros premiados en concursos internacionales. Cuenta esta rosaleda con 3.500 ejemplares, de casi 600 variedades diferentes; varios de ellos son históricos, algunos del siglo XVIII y siglo XIX y, la mayoría, de principios del XX.
También digno de destacar es el Túnel de Cicadales alberga una colección de las coníferas más primitivas (cicadáceas, stangeriáceas, zamiáceas), plantas que son auténticos fósiles vivientes.
No pudimos visitar el Orquidiarum y tampoco la Colección de Cactus y Crasas, ya que, aunque no parezca lógico, las instalaciones que los albergan se encuentran cerradas los fines de semana, por no contar con personal suficiente.
En conjunto, el Jardín lo encontramos bastante descuidado, con abundantes plantas de las que sólo existía el cartel indicativo de su nombre. Los recortes han hecho amplia mella sobre él, apenas cuenta con gente que lo sostenga, es una lástima que una obra de esta envergadura se vea en una coyuntura tan difícil. Esperamos que algún día las circunstancias cambien y la Ciencia no se vea mermada en sus posibilidades de futuro.