GEOLOGÍA. LAS TERRAZAS DEL EBRO EN ZARAGOZA

07-01-2018

Fotografías al final del texto

Grupo de Geología de ANSAR
Grupo de Geología de ANSAR

Partimos del barrio de Puerto Venecia quince personas pertenecientes al Grupo de Geología de ANSAR para poder determinar un glacis y las distintas terrazas del río Ebro. Juan Pablo Castro Encabo, como siempre, iba a intentar hacernos comprender éstos fenómenos geomorfológicos: Su génesis, características estructurales, situación geográfica en la ciudad y las diferencias entre los dos depósitos aparentemente iguales.

1ª Parada: Rotonda del tercer cinturón, cercano a un centro comercial.

La estructura que se encuentra a la vista en un depósito de gravas, posiblemente perteneciente al glacis K (para todos los niveles de terrazas y glacis seguimos la terminología del mapa geológico del IGME), en principio nos pareció una terraza, pero Juan Pablo nos indicó las diferencias más evidentes: Los clastos son en general angulosos por lo que nos indicaría que el transporte ha sido muy corto, prácticamente todos son calizos con lo que su origen sería de un depósito de carácter homogéneo, aquí vendrían de la Plana de María, la matriz sería un limo yesoso-margoso.

Los glacis son acúmulos de piedemonte que forman una rampa de ángulo muy tendido (inferior a 10º) y producidos por aguas de arroyada difusa no jerarquizadas, generalmente producidos por lluvias intensas pero escasas e irregulares, muy propias de nuestro clima. Suelen tener dirección perpendicular a las vías fluviales, a veces son muy difíciles de distinguir de un depósito de terraza si la fuente de alimentación del material fuera de una de ellas.

En la ciudad de Zaragoza sobre este glacis están situados el Parque de Atracciones, Pinares de Torrero, Stadium Venecia, parte alta del Barrio de la Paz, Zona comercial de Puerto Venecia, el Cementerio de Torrero (situado en parte sobre las gravas del holoceno superior del barranco de la Muerte)… Dicho glacis se originó en el Pleistoceno Medio a la vez que la terraza C.

2ª Diversas paradas: Final de la Línea de Autobuses 23, Cabezo Cortado…, recorriendo el Canal Imperial y mirando hacia el NE.

Situados en la terraza c divisamos una buena panorámica de la ciudad y distinguimos los niveles que van desde los más antiguos a los más modernos e, f, g y el nivel de inundación del río que corresponde al nivel h.

Juan Pablo con el Mapa del IGME correspondiente a Zaragoza, fue explicando los distintos niveles de las terrazas en donde se asienta la ciudad, así como el origen de estas estructuras geomorfológicas.

Los ríos tienden a usar la menor energía de transporte de la carga de su caudal y por tanto su recorrido (perfil) se adecúa a esta necesidad por lo que se crea un equilibrio entre su nacimiento y su nivel de base (a partir de este punto el río ya no erosionaría su cauce) y corresponde a un lago, un pantano, otro río o el mar, pero por causas climatológicas, como las glaciaciones, el nivel del mar baja y por tanto los ríos tienden a encajarse en su propio cauce con lo que abandona su antiguo trazado que queda colgado formando una terraza de agradación o deposicional, aunque en el conjunto de su cuenca dominen los fenómenos de sedimentación.

Sin embargo cuando se produce las deglaciaciones, el nivel del mar aumenta con lo que el río tiene menos pendiente y tiende a divagar ensanchando su cauce. Entonces forma meandros en los que deposita sedimentos en las orillas convexas de los mismos y al migrar por su llanura va dejando depósitos sucesivos de los materiales más gruesos transportados, llamados “point bar”, barras de gravas… También desmonta sus antiguas terrazas e incluso los glacis, por lo que de todos estos depósitos viejos apenas quedan retazos; en estos periodos domina la erosión lateral, que es el evento que predomina sobre la sedimentación en toda la depresión del Ebro desde el final del Mioceno hasta la actualidad.

Aunque menos común las terrazas también se pueden formar por causas geológicas tales como fallas, al hundirse uno de sus bloques, o bien por rebote isostático, que haría subir el terreno debido al vaciado erosivo, muy notable en la cuenca del Ebro desde el Plioceno.

En la cuenca del Ebro, sobre todo en las zonas en las que el río circula por antiguos depósitos miocénicos evaporíticos de la Formación Yesos de Zaragoza, disuelve continuamente estos materiales produciendo hundimientos. A la vez que esto sucede, se van depositando aluviones (sinsedimentarios) prolongándose estos fenómenos hasta deshacer los yesos; el río, para mantener su cauce, debe rellenar constantemente estas zonas kársticas cubiertas por aluviones erosionados en la parte superior de su cauce, con lo que se originan las terrazas de erosión de una manera diferente a la de las dos causas anteriores; a la vez afecta a los glacis haciendo que estos sean más extensos.

Actualmente este proceso de disolución de evaporitas sigue activo manifestandose en forma de dolinas con hundimientos medios del terreno entre 3 y 10 cm anuales con situaciones extremas en una zona de una autopista en Zaragoza con una subsidencia superior a 6 m en una docena de años.

Por lo que vemos las terrazas se pueden crear por tres motivos:

  • Cambios climáticos (terrazas de agradación)
  • Tectónicos
  • Por hundimientos kársticos (de respuesta compleja).

Las terrazas se ven como un depósito de cantos redondeados (sin ángulos) que nos indicaría un largo transporte, poligénicos (calizas, areniscas, pizarras…) que indican que su procedencia es de diversas zonas geográficas de la cuenca.  La matriz de estos depósitos es areniscosa y más raramente de cemento calizo, a veces un tramo de la terraza sólo tiene materiales lutíticos que marcaría una llanura de inundación o bien una corriente débil con lo que su capacidad de transporte sería muy reducida, habitualmente son depósitos paralelos a la corriente de los ríos.

Las terrazas más antiguas son las que están a mayor altura sobre el cauce, pero como excepción a veces las ocasionadas por subsidencia de los valles fluviales (de respuesta compleja), las terrazas más antiguas están por debajo de la más modernas e incluso por debajo de la llanura de inundación actual.

Por supuesto las modificaciones ocasionadas por el hombre en el Holoceno han complicado sobre manera todos los procesos naturales, influenciando decididamente como fenómeno erosivo cuasi mayoritario en la actualidad.

Como curiosidad los ríos aragoneses tienen los siguientes niveles de terraza:

Ebro en nuestra comunidad con 8 niveles (entre 5 y 220 metros sobre el cauce); Gallego con 12 niveles (2-175 m.); Huerva con 8 niveles (2-125 m.); Guadalope 11 niveles (4-81 m.); Queiles con 3 niveles (5-40 m.); Huecha con 6 niveles (2-120 m.); Jalón con 8 niveles (2-170 m.); Aguasvivas con 6 niveles (2-50 m.); Martín con 4 niveles (3-60 m.); Arba con 4 niveles (5-35 m); Sotón con 4 niveles (5-30 m.); Isuela con 4 niveles (5-90 m.); Flumen con 5 niveles (5-80 m.); Guatizalema con 5 niveles (5-60 m.); Alcanadre con 6 niveles (5-150 m.); Vero con 4 niveles (5-120 m.); y el Noguera Ribagorzana con 8 niveles (8-150 m.).

Por todo esto vemos la irregularidad de niveles y alturas de estos depósitos en toda la cuenca del Ebro, de orígenes tan diversos, complejos y efímeros.

LOCALIZACIÓN DE LAS TERRAZAS EN LA ZONA URBANA

Según el mapa geomorfológico Nº 383 de Zaragoza, del Instituto  Tecnológico Geominero de España: PARA VERLO PINCHA AQUÍ

 

Desde sus orígenes, la ciudad de Zaragoza estuvo situada en la margen derecha del río Ebro ocupando una de sus terrazas (la denominada g) y únicamente existió en la margen izquierda, desde muy antiguo, el pequeño enclave de El Arrabal (del árabe “rabad”: barrio).

Desde hace unos cuarenta años la ciudad se ha extendido enormemente por la margen izquierda, creando un gran barrio, el Actur, que ocupa la actual llanura de inundación, haciendo así que hoy en día el río Ebro atraviese la ciudad más o menos por su mitad.

La ciudad tradicional, la de la margen derecha, también se ha extendido mucho, y ocupa cuatro terrazas del Ebro: c, e, f y g.

Estas terrazas oscilan entre los 200 m s.m. (El Pilar) y los 255-260 m (Torrero), encontrándose el río Ebro a su paso por la ciudad a 190 m s.m. Sobre ellas se sitúan los siguientes barrios:

Terraza c: (Formada en el Pleistoceno Medio)

  • Valdefierro en su mayoría,
  • Torrero, más o menos entre el Canal Imperial de Aragón y el Tercer Cinturón, y la mayoría del nuevo barrio de Puerto Venecia.

En la zona este la confluencia de la terraza c concretamente en el Paseo del Canal hay un marcado desnivel hacia la e que ha sido salvado mediante escaleras para poner en comunicación este paseo (c) con las calles Lareche, Miguel Vicente Basanta, Levante y Terrazas de Cuellar, todas ellas en la e.

 

Terraza e: (Principio del Pleistoceno Superior)

  • Oliver, Miralbueno, La Bombarda, Parque Castillo Palomar y final Avda. de Madrid, prolongándose por es sur hasta la zona ocupada por los depósitos de agua de Casablanca.
  • Otro afloramiento de esta misma terraza discurre de norte a sur yendo desde el final del paseo de Sagasta hasta el puente de América, sobre el canal. Su centro lo ocupa el Parque Pignatelli y por el oeste estaría más o menos delimitada por el paseo de Ruiseñores prolongándose en una estrecha franja hacia el sureste que cruza el final del barrio de San José para después bordear el canal.

Terraza f: (Final del Pleistoceno Superior)

  • Estrecha franja que va de norte a sur ocupando desde la avenida de Navarra hasta Casablanca, ocupando el barrio de Delicias, el antiguo Psiquiátrico, una zona del distrito Universidad, el Ayuntamiento-Edificio Seminario y parte del barrio de Casablanca.
  • Un pequeño afloramiento se encuentra más al este, se prolonga más o menos paralelo a la avenida del Tenor Fleta, estando su límite en la calle María Moliner, que presenta un buen desnivel. Ocupa el centro del barrio de San José y la fuerte pendiente de su lado oeste ha tenido que ser salvada mediante escaleras tales como las de la calle Vista Alegre. Nuestra asociación se encuentra enclavada en esta terraza, en la que también se asienta la fábrica de Cervezas La Zaragozana.

 

Terraza g: (Holoceno Inferior)

 

  • Forma una ancha plataforma de noreste a sudoeste, con dos “brazos” que se prolongan uno por el este y otro por el oeste. Sobre ella se asienta la mayor parte de la ciudad, tanto la ciudad histórica (“Casco Viejo”) como la mayor parte de los ensanches del siglo XX: Gran Vía, paseo Fernando El Católico, Parque José Aº Labordeta, estadio de La Romareda, Hospital Miguel Servet (“La Casa Grande”)… Por ella discurre el río Huerva que atraviesa la ciudad hasta desembocar en el Ebro. En su brazo oeste se edificó la moderna Estación de Delicias y en el este la avenida Tenor Fleta, el Parque de Miraflores y la mayor parte del Camino de las Torres hasta el puente de las Fuentes, o de la Unión, sobre el Ebro.

Terraza h: (Holoceno Medio)

Esta terraza corresponde a la llanura de inundación del río Ebro, entendiéndose por tal la superficie que puede ser inundada ante una crecida eventual del río. Toda ella se encuentra por debajo de los 200 m.

Ante una gran avenida (periodicidad de un siglo) toda esta zona corre el peligro de ser anegada, como ya ocurrió con la riada de enero de 1961, la mayor del s.XX, que registró a su paso por Zaragoza un caudal de 4.130 m³/s. En estos momentos una riada como la del año 61 causaría muchos más daños al inundar una zona mayor pese a igual caudal, ya que el nivel de base actual del río es el pantano de Mequinenza (inaugurado en 1966), a 65 m por encima del nivel del mar. La situación todavía sería mucho más grave si llegase a producirse una de las “riadas de retorno de cada 500 años”.

Por todo esto, a lo largo de su historia de más de dos mil años, Zaragoza jamás se expandió por la margen izquierda del Ebro, salvo en el pequeño núcleo de El Arrabal, a continuación del Puente de Piedra, de marcado carácter rural e industrial-artesanal (las más contaminantes) y que escasamente sufría daños con las inundaciones.

Sin embargo en la actualidad la construcción de numerosas defensas y pantanos evitan y controlan las riadas ordinarias haciendo posible el asentamiento poblacional y agrícola. Hoy en día se encuentra ocupada la mitad de la llanura de inundación existente a mediados del s. XX. En Zaragoza viven ella aproximadamente unas 120.000 personas

¿Qué sucedería si se produjese una “riada de retorno de cada 500 años”?

En la margen derecha existen los barrios de:

  • La Almozara, nacido entorno a la industria química a finales del XIX, hoy ha experimentado un amplio crecimiento ocupando toda la llanura de inundación por el oeste de la margen derecha del Ebro.
  • Las Fuentes, surgido a mediados del s. XX, cuyo nombre es indicativo de la condición de sus suelos

En la margen izquierda:

  • El Arrabal, el más antiguos barrio de la margen izquierda, no solía inundarse con las riadas frecuentes del Ebro (periodo de 50 años).
  • Jesús
  • La Jota-Vidorrey, recientemente urbanizado
  • Parque Goya, creado a partir del año 2000
  • El ACTUR, muy extenso, construido a partir de los años 70 y 80.
  • Meandro de Ranillas: Urbanizado a raíz de la Expo de 2008, hoy ocupado por el Parque Luis Buñuel o Del Agua, la Ciudad del Justicia, el Palacio de Congresos, el Hotel Iberus…

Como curiosidad, la actual avenida de San José transcurre a través de prácticamente todas las terrazas que ocupa la ciudad: La c, desde su confluencia con el paseo del Canal hasta la Glorieta de la Balseta, la e desde ésta hasta el cruce con la calle Juan José Gárate, la f desde ésta hasta el cruce con la calle de María Moliner y la g desde aquí hasta su final en la confluencia con la calle Miguel Servet.